
Los gustos son la afirmación práctica de una diferencia inevitable. No es casualidad que, cuando han de justificarse, se afirmen de manera plenamente negativa, mediante el rechazo de otros gustos: en esta materia, más que en cualquier otra, toda determinación es negación; y los gustos son, sin lugar a dudas y sobretodo, disgustos, hechos horrorosos o que producen una intolerancia visceral por los gustos de los otros.
[bordieu]